Decadencia a fin de año!

Y en Argentina adelantan las agujas del reloj una hora y parece que todo se vuelve caótico, enloquededor, trastornado. Señores es UNA hora nomás. Esta mañana leí una nota en infobae, que pintaba el panorama como similar al fin del mundo.
Parece que nunca nadie cruzó al país carioca vecino, que tiene una hora más que nosotros. Simplemente alcanza con cruzar la aduana y adelantar la aguja más pequeña del reloj al número siguiente. Tan complicado es??
¿Será que los argentinos tenemos la maldita costumbre de hacer de las cosas sin importancia un mundo, y sobre los asuntos verdaderamente importantes, hacer la vista gorda?
O quizás ¿será que por estos últimos días del año a los redactores se les acaban las ideas para la construcción de una nota de interés? No puedo dejar de lado la risa que experimenté el pasado martes 25 de diciembre, cuando en un noticiero de Córdoba, de un canal de aire, le hacían la nota a tres pelagatos borrachos que salían de una popular fiesta de un boliche, que habían ido a festejar la nochebuena. Ver- gon - zo so!!!

Entre agujas trastornadas, fiestas, brindis y notas sin sustento nos encuentra este fin de año. Lamentablemente siguen ocurriendo cosas un poquito más interesantes.