5 de diciembre de 2012

Todo es culpa de La Mona...

Esa frescura q jamás se pierde... Quizás pq hemos crecido  al ritmo del tunga tunga, y acostumbrados a transitar por la Isla de los Patos los domingos a la mañana para ir a Barrio Jardín, o tal vez por pispear las montañas cuando se viene huyendo del microcentro y subís por Lamarca para llegar a tu casa. Quizás porque los sábados a la tarde  te cruzás a la Mona Jiménez haciendo ciclismo por el Cerro, o porque te tomás el E5 y por esas cosas de la vida un grupo de hinchas de Belgrano invaden el colectivo, pero se bajan en Alberdi.

Quizás porque tenemos esa ebullición en la sangre, digna de una ciudad que dio orígenes a cuestionamientos políticos, sociales y económicos como el Cordobazo y quizás porque tengamos la  Universidad más antigua de América Latina.

Quizás por la cercanía del río tenemos una frescura admirada y reconocida en todos lados...

Quizás porque tenemos un no se qué, que viene de no sé donde y me hace extrañarlo tantísimo, no sé por qué... O mejor dicho, si sé por qué. Porque tengo terror de olvidarme, de perderlo, de no pertenecerle. Solo yo sé que vengo de ahí.

20 de mayo de 2012

Suelen llamarlo Extrañitis...

Y si me estoy perdiendo de algo?
Y si esa pérdida es irreversible?
Y si mi mente es tan poderosa que con tan solo imaginarlo se hace realidad?
Y si indefectiblemente todos los caminos conducen a Buenos Aires?
Y si todo se cocinará acá?
Y qué haré si estás alejada de mi?
Y si lo que viene está plagado de adrenalina y una pizca de miedo?
Y si por ahí cae la ficha, y aún no lo puedo creer?
Y si creo que nada volverá a ser como era?
Y si La Docta quedará en donde está?
Y si paro dos segundos, claramente la información empieza a bajar como piezas de Tetris, pero en el nivel 10, a 180 km por hora.
Entra, hace ruido, y se va.
Nada por aquí...
Nada por allá.