22 de enero de 2008

Nada que ver con nada


Quiero que me pases a buscar en tu auto con tu perro sentado en el asiento trasero, asomando el hocico y la melena por la ventanilla. Mientras tanto, yo con mi vestido rojo exuberante, que más de uno me ha criticado y/o exigido que me lo quitara, pero no me importa! a mí me encanta, te voy sirviendo esa bebida que a vos tannnto te gusta. Esperás el verano a que llegue para degustar semejante manjar hiper refrescante.
Con el tema que me hiciste bajar, al palooooo
Parece un poco extraño la proposición, va, más que proposición es una utopía ...
1º porque no te estoy proponiendo nada, 2º porque no hay forma que me pases a buscar, 3º va a ser imposible meter al perro en la parte trasera del auto. Ese perro es muy grande y pierde muuucho peloo... no quiero que tu mamá se enoje con vos por un simple capricho mío.
Obviamente que si la idea te cierra en algún punto, no tenés más que hacérmelo saber y yo me subo a tu auto sin ningún drama. Después buscaremos alguna excusa para justificar la ausencia de ambos
Se me ocurrió también que podemos comer sanguchitos de pan negro con jamón y queso. Sabés que son todo para mí.
Eso si, nada de besos ni de andar de la mano, no quiero que la gente piense mal, y nos vea como dos perros verdes
Estaría bueno que le dijeras a tu perro que me venga a visitar a Córdoba, aunque nunca lo he conocido, me parece que es un buen momento

Husmeando en la compu del laburo encontré este texto que no recuerdo bien cuando lo escribí, pero estoy segura que forma parte del libro de mis memorias que deseaba escribir por aquel entonces. Ojo! la idea sigue en pie. Es una especie de texto surrealista, adaptado a mi concepto de surrealismo. Una revolución de significados que hoy por hoy no tienen importancia...
Simplemente me causó tanta alegría encontrarlo, y tanta risa leer semejante boludés apelmasada. Cabe aclarar que lita motivó la escritura de este texto

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